Periodismo y democracia: el valor de los medios locales para la comunidad hispana de Estados Unidos

Los medios periodísticos hispanos en Estados Unidos y su impacto en sus comunidades y en la democracia fue el tema de análisis de las periodistas y editoras Maritza L. Félix, Paola Jaramillo y Madeleine Bair, directoras y fundadoras de Conecta Arizona (Arizona), Enlace Latino (Carolina del Norte) y El Tímpano (California), respectivamente, en una emisión especial de La Hora del Cafecito, el programa de radio de Conecta Arizona.

Los tres medios fueron objeto de estudio de una investigación en la Universidad de Columbia, en Nueva York, realizada en marzo por el profesor Yamil Vélez, quien estudió -con el apoyo de Google Initiative- cuál es el impacto del periodismo hiperlocal en las comunidades a las que sirven y cómo se convirtieron allí en impulsores cívicos, y de qué manera se diferencian, en contenido editorial y alcance comunitario, con las grandes y tradicionales compañías de medios.

En el diálogo, tanto Maritza L. Félix como Paola Jaramillo y Madeleine Bair contaron cómo y por qué fundaron sus medios, en qué contexto político, económico y social surgieron, cómo luego se expandieron a otras plataformas, cuál es el vínculo que establecen con sus comunidades y cómo dialogan con ellas, cuáles son sus agendas informativas y cómo enfrentan la desinformación, un tema que afecta especialmente a la colectividad hispana migrante.

️🎙️ En esta conversación comunitaria, vamos a hablar de la importancia del periodismo local, de tres medios no tradicionales de comunicación que tratan de informar todos los días con recursos, expertos, noticias que a lo mejor los medios grandes y masivos de comunicación ignoran. Hay tres medios comunitarios en Estados Unidos que hasta el momento se han convertido en motor cívico de sus comunidades. Y esos tres medios hiperlocales no tradicionales fueron objeto de estudio de una investigación de la Universidad de Columbia, apoyada por la Iniciativa Google, para saber cómo combaten la desinformación y la falta de contexto en las noticias, y cómo empoderan al electorado, a la comunidad, para tener una participación cívica mucho más importante, más activa, en las elecciones locales. Me acompañan dos colegas a las que admiro muchísimo: Madeleine Bair y Paola Jaramillo. ¿De qué se tratan sus proyectos periodísticos?

➡️ Jaramillo: “Soy inmigrante colombiana y resido en Raleigh, Carolina del Norte. Somos una plataforma digital de noticias sin fines de lucro para los inmigrantes latinos que consumen noticias en español en Carolina del Norte. Nuestro enfoque es la política local y estatal, los asuntos de migración y la salud pública en el estado. Iniciamos en 2018, en un momento en que Carolina del Norte estaba pasando por un grave problema de desconfianza y de redadas, problemas graves en nuestras comunidades, donde había mucho miedo, mucha desinformación rondando. La gente se hacía muchas preguntas acerca de sus derechos laborales, sus derechos familiares, qué hacía si llegaba Inmigración a su casa, dónde podía ubicar a sus familias, cómo se podía legalizar, cómo podía votar. Eso sumado a que cada vez más los medios tradicionales dejaron de cubrir noticias locales, fueron cortando sus tirajes y dejaron de llegar a todas las zonas rurales. Básicamente ese estado nos llevó a nosotros a lanzar Enlace Latino a finales de 2018. Comenzamos simplemente con un website y ahora tenemos además cuatro newsletters para llegar a diferentes tipos de audiencias, un podcast y nuestro canal de WhatsApp también”.

Paola Jaramillo, directora y fundadora de Enlace Latino, en Carolina del Norte.

️🎙️ Como bien dices, surgió en una de las épocas más parteaguas, podríamos decir, de la política local de Carolina del Norte y una época también en la que empezaron a desaparecer muchos de los medios independientes en otros idiomas que no sea el inglés, no solamente en la comunidad de Carolina del Norte, sino en todo Estados Unidos, en donde el periodismo podría estar en crisis en desiertos informativos. Ahora, Madeleine, cuéntanos de ti y de El Tímpano.

➡️ Bair: “Somos una organización de periodismo comunitario y participativo para y con las comunidades inmigrantes e hispanohablantes del área de la Bahía, en California. Fundé El Tímpano hace alrededor de cinco años. No soy inmigrante, soy de Oakland, California, y mi comunidad es bien diversa, con diferentes culturas, idiomas. Y aquí, ni en cualquier otra ciudad donde he vivido en Estados Unidos, incluso en Chicago y Nueva York, nunca vi esta diversidad de las comunidades en las noticias locales. No la veo. Hay tantas comunidades que son casi invisibles en los medios locales. Al mismo tiempo, los medios locales no sirven a estas comunidades diversas, especialmente a los inmigrantes, los que no hablan inglés o los que no tienen un smartphone. Otra razón de por qué empecé El Tímpano es que me casé con un inmigrante de Ecuador; su familia vive en Nueva York y cuando yo vivía allí vi la desigualdad entre la calidad y cantidad de noticias que yo podía conseguir en inglés y las noticias que tenían mis suegros, que tenían mucho más tiempo en Nueva York, estaban mucho más interesados sobre lo que pasa en Nueva York, pero solamente existía una media hora por la noche (de noticias) en Univisión o Telemundo. De hecho, en Nueva York hay más opciones que en la mayoría de lugares, todavía hay un periódico en español, pero me han contado que no es como era antes. Realmente vi el impacto que tiene la falta de buena información o buenas noticias para la gente, que simplemente sigue en su vida con preguntas y no sabe dónde conseguir respuestas. O si hay desinformación que recibe por los amigos, por las iglesias, por las redes sociales y no hay buena información para combatir eso. Entonces, cuando me mudé de vuelta a Oakland con mi marido, vimos que hay una gran y creciente comunidad migrante aquí y muy pocas opciones para buena información (en español) para estas comunidades”.

️🎙️ Y lo haces no solamente en español, sino también en maya, que es otra de las lenguas o dialectos que están creciendo, que, aunque no es una gran cantidad de personas la que lo habla, los que sí utilizan y prefieren comunicarse en ese idioma necesitan también recibir información en la que puedan confiar, con la que puedan empatizar y con la que puedan conectar. Ahora les cuento yo qué es Conecta Arizona, que nació en 2020, cuando, por las restricciones fronterizas por la pandemia, mi mamá se quedó en el lado mexicano de la frontera y yo en Estados Unidos, y me empezó a mandar a través de WhatsApp un montón de información que encontraba en las redes. Yo al principio le decía ‘mamá, ¿qué me estás mandando?’. Porque me decía: ‘Hija, cuando haya mucho calor se va a quitar el coronavirus y es que en Arizona se pone muy caliente en verano’. Yo le decía ‘bueno, no sé si en realidad esto vaya a ser así’. Era muy temprano, apenas marzo, abril de 2020 y no podíamos saberlo. Lancé Conecta Arizona con un pequeño grupo de WhatsApp con mi mamá, mis amigos, mi marido, mis tías y primos, para combatir esta desinformación -principalmente de salud- sobre la pandemia, que se estaba compartiendo en las redes sociales. Y se fue corriendo la voz, el grupo creció y llegó hasta los límites, creamos listas de distribución, de ahí nos fuimos a un programa de radio, de allí al newsletter, luego hicimos un podcast para WhatsApp y lanzamos la página en internet. Estamos tratando siempre de proveer noticias, recursos, para conectar a la comunidad con expertos en las plataformas en las que también nosotros estamos, porque también somos parte de la comunidad. Nuestro corazoncito nace en los cafecitos en WhatsApp, donde tenemos las conversaciones diarias, pero también estamos en múltiples plataformas tratando de acercar esta información a ti para que no tengas que hacer el trabajo duro de ir a buscarnos sino nosotros encontrarte donde estás. Empezamos con un enfoque muy delimitado a la salud y cómo combatir la desinformación que había alrededor de la pandemia, y con temas de inmigración también, por las restricciones fronterizas. Nos sorprendió la elección 2020 porque creí que Conecta Arizona iba a durar tres meses, y ahí estuvimos contestando más de 500 preguntas sobre las elecciones. En esa época aún usábamos mascarillas, fue una época crucial donde los simpatizantes de (Donald) Trump y (Joe) Biden se enfrentaban afuera de los centros electorales. Eso nos ayudó a entender que podemos hacer un periodismo mucho más proactivo y no siempre reaccionando y eso es lo que hemos estado tratando de hacer. Por eso cuando Yamil Vélez, el profesor de la Universidad de Columbia que realizó esta investigación, nos invitó a ser parte de ella dijimos que sí porque también queríamos ver qué impacto teníamos, porque usamos medios no tradicionales de comunicación para llegar a nuestra audiencia, y muchas veces es muy difícil medir el impacto que estamos teniendo. El estudio nos ayudó a evaluar cuál es la respuesta de las comunidades a las que nosotros servimos no solo en cuanto al consumo de noticias sino qué hacen con ellas. ¿Cómo le hacen ustedes, Madeleine, para priorizar esta cobertura de elecciones o la política, que a lo mejor no es tan fácil de vender, que es mucha controversia y donde hay mucha desinformación?

➡️ Bair: “Nos llamamos El Tímpano porque todo lo que hacemos empieza en escuchar. Antes de empezar, me reuní con líderes de la comunidad latina y maya de Oakland y escuché a residentes y a inmigrantes, especialmente a los que no hablan inglés. Queríamos escuchar cuáles eran los asuntos que más les importaban. Ya que no soy inmigrante, era súper importante empezar con esta estrategia de escuchar. Hicimos encuestas, tuvimos conversaciones por casi un año. Simplemente escuchamos de la gente cuáles son los asuntos más importantes y qué información busca acerca de esos asuntos, qué quiere que sea diferente en los medios locales e hispanohablantes. Este fue un gran descubrimiento y también una manera de empezar a sembrar relaciones de confianza con la comunidad. De lo que escuchamos, el asunto más importante para la comunidad siempre fue la salud, (incluso) antes del coronavirus. Después de eso, ya que vivimos en California, en la región más cara de todo el país, el tema fue vivienda, porque hay una crisis de vivienda acá. Estos dos temas son los que más importan a nuestra comunidad, pero siempre estamos escuchando. Nuestra plataforma primaria es de mensajes de texto, entonces cada semana mandamos información acerca de algún asunto que la comunidad nos dice que le importa y también la invitamos a responder diciéndole: ¿en qué manera le ha afectado este asunto o qué otras preguntas tienen acerca de eso? Siempre estamos escuchando. Es una conversación consistente, de largo plazo con la comunidad, y es súper importante porque los asuntos y las prioridades de las comunidades siempre cambian. También lo que escuchamos de nuestra comunidad es diferente de lo que vemos en otras fuentes de noticias; estamos escuchando muy bien a las comunidades. Por ejemplo, mientras en muchas fuentes de noticias escuchamos, acerca de la vivienda, que las protecciones para inquilinos hechas en la pandemia paraban una crisis de desalojamiento, nuestra comunidad nos decía que sí había una crisis de desalojamiento a pesar de estas protecciones. Esa es la manera en que escuchamos y hacemos nuestras estrategias de priorizar los asuntos que son prioridades para nuestras audiencias”.

Madeleine Bair, directora y fundadora de El Tímpano, en California.

️🎙️ Y, en el caso de Carolina del Norte, la política es un tema de supervivencia, principalmente para las comunidades migrantes, ¿no?

➡️ Jaramillo: “Sí, totalmente y más, porque Carolina del Norte ha sufrido una serie de cambios en cuanto a cómo los inmigrantes hemos sido vistos. Durante la década de los 2000, y un poquito antes, los inmigrantes eran bienvenidos. De hecho, los inmigrantes ayudaron a construir y a desarrollar ciudades como Charlotte, que ahora ya es una ciudad y hace 20 años era un pueblo grande, con infraestructura, construcciones, carreteras, cultivos; Carolina del Norte es productor número uno de tabaco, papa dulce, fresa, árboles de Navidad. ¿Quiénes trabajan ahí? Los latinos. ¿Quiénes trabajan donde se producen la carne, el cerdo, el pollo? Los latinos. En ese entonces éramos bienvenidos y bien vistos, pero todo cambió y se empezaron a aprobar proyectos de ley en contra de las comunidades inmigrantes. De hecho, Carolina del Norte era uno de los estados que permitía a las comunidades inmigrantes indocumentadas tramitar una licencia de conducir, y la quitaron. Empezaron a restringir una serie de cosas y a enviarnos un mensaje totalmente diferente: ‘si estás indocumentado, vete, ya hiciste lo que tenías que hacer, ahora ya no te queremos más aquí’. Ese tipo de discurso estatal se empezó a alinear con el discurso federal, con la elección del ex presidente (Donald) Trump. Entonces empezamos a ver una Asamblea Legislativa (estatal) dominada por los republicanos, y no quiere decir esto que bajo los demócratas en el pasado no hubiéramos visto cosas negativas. De hecho, bajo un gobernador demócrata y con una Asamblea Legislativa demócrata quitaron el acceso a licencias de conducir para los indocumentados. Pero el discurso ya fue directo, muy en contra de nuestra comunidad. Nosotros ya habíamos trabajado en medios en español, aquí en el estado, en periódicos tradicionales. En Carolina del Norte, los periódicos en español que hay llevan muchos años, son semanarios, gratuitos, que dejaron de cubrir cosas que eran clave para la comunidad, dejaron de ir a las comunidades rurales. Carolina del Norte tiene 100 condados, pero solamente 21 son considerados urbanos y el resto son rurales; de esos 21 que son considerados urbanos, solamente hay 5 ciudades grandes, el resto son pueblitos pequeñitos. Entonces, con muchas limitaciones, empezamos a ver tras las elecciones todo lo que estaba pasando: la gente empezó a hacer muchas preguntas en las redes sociales, a mandarnos mensajes de texto y mensajes privados, a llamar. Empezamos a notar que había vacíos informativos en temas muy primordiales, como asuntos políticos: no entendían cómo las leyes que eran aprobadas les afectaban y por qué les debía importar, porque decían ‘yo no voto, y entonces ¿cómo me afecta a mí?’; pues resulta que aquí, votes o no, las leyes nos afectan a todos, indistintamente del estatus migratorio que tengamos. También información o vacíos informativos en cuestiones de inmigración, pero no tanto en conocer qué ley federal se aprobaba sino más bien recursos que les ayudaran a sobrevivir y a navegar en el sistema de inmigración. Por otro lado, el tema de desarrollo laboral: había muchas dudas con respecto a qué puedo hacer y qué no, y todos los temas como que se entremezclaban. Entonces dijimos: ‘Vamos a la gente, estamos escuchando esto, pero qué más podemos hacer’. Nos juntamos con organizaciones que atienden a las comunidades migrantes e iglesias y empezamos a hacer reuniones para preguntar qué información necesitaban o no tenían, qué estaba pasando en sus comunidades, qué necesitaban saber. Basados en esas charlas con miembros de la comunidad, con trabajadores del campo con visa o sin visa, con familias indocumentadas o mixtas, con toda esta información lanzamos Enlace Latino, un medio digital, porque no teníamos dinero para tener un periódico y aparte ya estaba visto que la gente se informa de otras maneras, no solamente de las maneras tradicionales de ir a la tienda y tomar un periódico. Comenzamos con un website, que se fue extendiendo a otros productos. Preguntamos a la gente, abrimos canales de comunicación, escuchamos y finalmente producimos periodismo basado en lo que la misma audiencia te dice que necesita. En cuestiones políticas, por ejemplo, nuestro enfoque no solamente es el año electoral presidencial, cada 4 años, sino que hacemos un seguimiento al tema electoral año tras año, porque en Carolina del Norte tenemos elecciones locales y municipales cada año. Tratamos de explicar cosas sencillas, por ejemplo, cómo funciona el proceso electoral, dónde puedes votar, cuáles son tus derechos para ir a votar, cómo leer tu boleta electoral, dónde la puedes imprimir, qué significa la casilla 1, la 2, la 3, con dibujos y gráficas muy didácticas para que la gente pueda entender el proceso y no se desanime y participe. Porque desde nuestro punto de vista el proceso electoral está hecho para que la gente no vote; el objetivo final es que la gente no vote, es tan complejo, tan largo que la gente se desanima para salir a votar. Y para nosotros como comunidad latina inmigrante es más difícil todavía, porque al final del día venimos de países donde el voto no tiene mucha importancia, es nulo o lo roban; en Colombia, por ejemplo, te dicen ‘tu voto vale lo que vale un tamal’. Son cosas que la gente trae de nuestros países a Estados Unidos y nosotros tratamos de decirle lo contrario: aquí es fundamental que salga y vote, y si no puede votar es fundamental que sepa cómo funciona el sistema, para que pase la voz a sus vecinos, a sus familias, a sus hijos y pueda incitarlos, invitarlos a que vayan y voten, para finalmente entender lo que pasa en la política local y estatal. No necesitas ser un ciudadano, no importa tu estatus migratorio para entender o para ir a hablar con un legislador. Aquí el legislador no te pregunta si estás documentado o no, te pregunta cuál es tu código postal para saber si es el legislador que te representa, pero más de ahí no va y tu voz igual se escucha. Entonces es fundamental tratar de que nuestra gente tenga toda esa información año tras año porque entendemos muy bien que es una información compleja, larga, con muchos detalles para entender. Entonces, nos basamos en escuchar a la gente, preguntarle qué necesita y producir información de acuerdo a las necesidades que tienen. La comunidad es como un ente vivo y el periodismo que producimos también. Lo que estamos produciendo hoy probablemente no es lo mismo que vamos a producir dentro de tres meses, porque las necesidades informativas son totalmente diferentes. Creo que la clave está en escuchar”.

Maritza L. Félix, directora y fundadora de Conecta Arizona, en Arizona.

🎙️️ En el caso de Conecta Arizona, servimos a una comunidad muy diferente, somos una comunidad transfronteriza. Hay muchos que tienen doble ciudadanía, que nacieron a lo mejor en Estados Unidos y se criaron en México y luego vienen de compras y a votar y se devuelven, o tenemos muchas familias con estatus migratorios mixtos, es decir, que llegaron aquí hace 20 años y que su hijo mayor va a poder votar porque nació en Estados Unidos, es ciudadano y ya se registró para hacerlo. O tenemos muchos jóvenes con (el programa de protección migratoria) DACA que, vimos en las elecciones de 2022, en Arizona fueron los propulsores del voto comunitario, no solamente de latinos, al gestionar una propuesta que les iba a dar un alivio económico en las colegiaturas y universidades estatales, pero que al llenar esa propuesta ya motivaban a la gente a la que sigan completando los demás espacios en las boletas, que son larguísimas, difíciles de entender, más para quienes no estamos familiarizados con el proceso. En las elecciones del 2020 fue mucha la labor de explicar el sistema electoral de Estados Unidos y por qué Hillary Clinton tuvo más votos que Donald Trump, pero Trump se convirtió en presidente. Tuvimos que explicar eso cuando en nuestras democracias latinoamericanas el que tiene más votos gana, pero acá no es así. Tuvimos que contestar también sobre el voto por correo en Arizona, donde lo hemos hecho por los últimos 20 años. Aun así, surgieron teorías de conspiración con las que ahorita, en 2023, seguimos peleándonos porque todavía existen negacionistas que insisten en un fraude electoral que no se ha podido documentar o confirmar después de varias auditorías. En las elecciones de 2022, nuestro trabajo fue más proactivo: hicimos guías bien sencillas sobre cómo votas, en dónde, si estás viviendo en el extranjero o en México cómo puedes votar. Además, pusimos caras a los candidatos, con sus propuestas en temas como educación, salud, seguridad pública o medio ambiente. Fueron guías bien sencillas y muy accesibles para todos, para generar la confianza en participar en las elecciones, porque cuando no participamos o no votamos estamos dejando que alguien más elija por nosotros, nuestro futuro y el de nuestros hijos. En esas elecciones empezaron a documentarse muchos residentes permanentes que van a poder votar por primera vez en las de 2024 y a lo mejor van a ser los únicos en su familia. Esa es nuestra audiencia. Otro rol fue tratar de educar sobre quiénes somos los votantes latinos, porque por mucho tiempo nos han tratado como un bloque monolítico, como que todos pensamos igual, y no es lo mismo un cubano en Florida que un chicano en California, un mexicano naturalizado en Arizona o un colombiano en Carolina del Norte. El voto latino tiene muchas aristas y nos dimos cuenta porque con Conecta Arizona tenemos conversaciones con la comunidad todos los días de 2 a 3 de la tarde en WhatsApp. Por ejemplo, recientemente hablamos sobre la posibilidad de que Joe Biden sea reelecto presidente y el tema fue la edad. Platicamos de esas cosas e identificamos que los polos son muy extremos en política y que son muy poquitos los comunes denominadores que a veces nos enlazan. Por ejemplo, en las elecciones pasadas el aborto fue un tema primordial para los votantes de Arizona, donde muchos demócratas coincidieron en ese tema con los republicanos. También identificamos que los votantes son independientes, pero esto lo hicimos escuchando, con toda la intención de sentarnos y oír, con la mente abierta, lo que nuestra comunidad nos quiere decir. Otra pregunta que tengo es: ¿cuál fue una de las desinformaciones que más ha afectado a sus comunidades y cómo, en sus coberturas editoriales o enganche comunitario, han tratado de solucionar esta brecha de información y llenarla con información verdadera? Porque cada vez que hay un huequito en las noticias, ahí es donde se filtra la desinformación y se saca de contexto la información, que a lo mejor es cierta, pero que está mal utilizada.

➡️ Jaramillo: “Una de las de las cosas más fuertes que vivimos en Carolina del Norte en ese punto en las elecciones pasadas, por ejemplo, fue cuando el propio Partido Republicano lanzó una campaña de cosas que en realidad no eran ciertas: sacó de contexto fotografías de los otros candidatos, palabras que habían dicho en un discurso general con algo diferente, imágenes sacadas de cosas que no eran ciertas, montajes. Eso confundió muchísimo al electorado, porque no entendía qué era verdad y qué no, y lo pasaba y compartía por redes sociales. ¿Cómo dudar si es el mismo candidato del partido que difunde esa información? Entonces, nos ha tocado hacer un chequeo informativo, contactar a las personas, explicar cuál fue la foto original y cuál fue montada. Hablarle a la gente con la realidad, con la verdad, que es en lo que finalmente se basa un buen periodismo, con los hechos como son, para que la gente tuviera esa información a mano y pudiera tomar las decisiones que debía tomar, pero bien informada. Ha sido un problema. Las redes sociales han sido un problema porque nuestra comunidad tiende mucho a compartir, pero ni siquiera se pregunta si puede ser o no. Simplemente comparte, y cuando comparte enlaces la gente no le da click y luego te pregunta ‘pero cómo tal cosa’, y yo misma le digo: ‘si le hubieras dado click, la respuesta a tu pregunta está en el artículo’. Muchas veces los medios, para poder tener más lectores, cambian los titulares y cuando entras a la nota te das cuenta que no tiene nada que ver con el titular. Es muy complicado porque es desgastante dedicarte a buscar esas falsedades en cada uno de los discursos, pero es parte de lo que tenemos que hacer. ¿Entonces, qué hacemos? Creamos credibilidad, ponemos menos atención al click y nos tomamos el tiempo para, periodísticamente hablando, hacer las cosas como debe ser. Ese es otro problema en el que los medios hemos caído en el afán de quién entrega la información primero, cuando en realidad lo importante no es quién la entrega primero, sino quién la entrega bien, de manera correcta; pero entre tanto ya se han difundido una serie de desinformaciones con la que luego tienes que batallar (para desmentirla). En los newsletters o en WhatsApp decimos ‘esta es la fuente real’, estás llevando a la gente hacia fuentes confiables y seguras para poder empezar a crear esos lazos de confianza con la comunidad. Es un trabajo de día a día, que no termina. En el tema electoral, esa guerra entre candidatos fue muy complicada, no solo a nivel de candidatos presidenciales, sino candidatos muy locales. Carolina del Norte lastimosamente no tiene representación hispana en la Asamblea General, los representantes en su mayoría son hombres blancos, dueños de compañías de construcción o de campos agrícolas rancheros. Obviamente por eso nunca vemos ninguna ley que favorezca a quienes trabajan en los ranchos, porque ellos son los dueños de los ranchos. No tenemos representación. Tuvimos un candidato latino, pero por esa campaña de desinformación tan grande que hubo perdió por 500 votos, y nos quedamos sin representación. No tenemos ninguna voz latina en la Asamblea Legislativa, entonces es un trabajo día a día. Con el tema de la salud lo vimos mucho más, con cosas relacionadas con tomar clorox o una pildorita. Fue bastante duro y difícil trabajar con nuestra comunidad para que entendiera que una cosa son las historias reales y otra son todo este tipo de desinformación que vemos en redes”.

Enlace Latino, en Carolina del Norte, sirve a la comunidad hispana especialmente en las zonas rurales.

🎙️️ Es hora de hablar más a fondo de este estudio que la Universidad de Columbia está utilizando también para renovar el significado del periodismo hiperlocal en Estados Unidos, un periodismo que estamos haciendo con acento y con talento. Y es que pareciera que, en los últimos tiempos, en lugar de informar, estamos combatiendo la desinformación por mucho tiempo, o sea, como que la mitad de nuestro trabajo, que antes era producir y crear contenido original, ahora es hacer el fact-checking, verificar datos, explicar a la gente que las opiniones no se pueden verificar, que son simplemente opiniones y demás. También algo bien importante de estos tres medios de comunicación es que creamos espacios para el diálogo, un lugar en el que el lector, el residente, el migrante tiene la facultad de escribirnos y preguntarnos sabiendo que es un espacio seguro en el que nadie le va a juzgar y que le vamos a responder, y que si no tenemos las respuestas lo conectaremos con el abogado, el doctor, el del Departamento de Salud o con quien sea. Eso es lo que estamos haciendo. Madeleine, a ustedes en California, ¿cómo les fue con la desinformación?

➡️ Bair: “Sí, exactamente la desinformación es lo que ustedes dijeron: no es tanto una manera de simplemente contar a la gente lo que es verdad, sino la necesidad de trabajar día tras día para desarrollar la confianza con la comunidad, porque sin eso no importa si nosotros tenemos lo que es verdad, la gente no nos va a creer. Es uno de los resultados de esta investigación que seguimos con el profesor Yamil Vélez, que estudia la desinformación entre las comunidades latinas y dice que el fact-checking es como una respuesta, pero que lo más eficaz para combatir la desinformación es desarrollar confianza. Eso es lo que hacemos día tras día: nuestro equipo está en la comunidad, visitamos iglesias, escuelas, estamos en los festivales para que la gente nos vea, nos conozca, y para nosotros conocer a nuestra audiencia y de allí sembrar esta confianza, para que sepa que si alguien le pasa algo sospechoso por WhatsApp nos puede contar y preguntar: ‘¿me puedes revisar esto, lo has visto? Sin esa confianza no habrían hecho eso. Esa es la manera en que trabajamos. También hemos desarrollado un taller sobre desinformación para latinos inmigrantes, con información básica para entender qué es la desinformación, por qué se hace, cómo funciona la economía de internet con el clickbait y cómo puede identificar la desinformación para empezar a parar su difusión en la comunidad. Es un taller muy popular, porque la gente aún no sabe qué hacer o si tiene una sospecha de que hay un fenómeno de desinformación quiere tener la capacidad de combatirlo. Para El Tímpano ha sido una colaboración con nuestra audiencia, porque nosotros nunca podremos ver y verificar cada tipo de desinformación que está en nuestra comunidad; por eso, mejor colaboramos con nuestra comunidad para tener, juntos, la capacidad de identificar y combatir la desinformación”.

El Tímpano, en California, sirve a la comunidad hispana en el área de la Bahía. 

️🎙️ Este análisis que hizo el profesor Yamil Vélez, en el Columbia Journalism Review, consistió en personas que ya eligen nuestros medios de comunicación en nuestras comunidades, que reafirmaron su compromiso de seguir consumiendo noticias con nosotros. Pero también hubo más de 350 personas que se unieron a nuestros medios, que no los conocían, que quizá nunca habían oído hablar de ellos y empezaron a recibir nuestro contenido durante un período mayor de 2 meses. Al terminar la investigación y como parte del proceso de recabar los datos, les preguntaron qué pensaban de El Tímpano, Enlace Latino y Conecta Arizona y algunos de los comentarios fueron: ‘Me gusta porque me mantiene informado sobre lo que más nos interesa’; ‘Nos gusta porque las noticias son actualizadas y relevantes’; ‘La información es clara, fácil de entender y me entretiene’; ‘Me gusta el tratamiento de los temas migratorios’; ‘Tiene contenido diverso y es algo imparcial’. Cuando comparaban nuestros contenidos con los de los medios tradicionales, principalmente televisión, decían que, aunque les gustaba y los mantenía entretenidos, cuando veían las noticias en la televisión sentían que había sesgo en la manera en que las estaban presentando o que era demasiado a la ligera el contenido que les estaban dando en un minuto y 45 segundos, que es lo que dura un reportaje en televisión, y que necesitaban ir más a profundidad y a más contexto. Y creo que eso es algo que nosotros, de manera no tradicional, estamos tratando de hacer. Nosotros, por ejemplo, utilizamos muchas gráficas, hemos utilizado el sentido del humor también para dar a conocer investigaciones que son polémicas, controversiales y que a lo mejor nos cuesta más identificar, hemos utilizado mensajes de audio con un podcast para WhatsApp. Quiero comentar más sobre el investigador que está detrás de este análisis que ayudó a comparar cómo los medios comunitarios hiperlocales estamos innovando y utilizando plataformas no tradicionales y tenemos un impacto real ahora medible en la vida cívica de nuestras comunidades: Yamil Vélez es profesor de Ciencias Políticas de la Universidad de Columbia, tiene un Phd en Ciencias Políticas de Stony Brook University (Nueva York) y un BA en Ciencias Políticas y Psicología de la Universidad Estatal de Florida. Su área de su estudio es la ética, la política, la interacción entre razas, todo lo relacionado con la perspectiva racial y la geografía política, con un enfoque muy marcado en inmigración. Antes de estar en la Universidad de Columbia fue profesor de la Universidad George Washington, entre otras. ¿Conclusiones?

➡️ Bair: “Es un honor colaborar con ustedes para la investigación. Una de las noticias tristes de esta semana es que cerró otro noticiero en español, desafortunadamente estamos viendo por todo el país que están cerrando las fuentes de noticias en inglés y en otros idiomas. Por eso es súper importante el trabajo que hacemos con muchos otros colegas alrededor del país, y no podemos hacerlo sin la colaboración con nuestra comunidad. Me alegra esta oportunidad de tener esta conversación con ustedes y nuestra comunidad”.

➡️ Jaramillo: “También estoy muy honrada de haber participado en este estudio con Yamil, que es muy importante, porque es una forma de que algo externo nos ayude a ver cómo la gente nos ve, cómo nos cree, cómo llegamos a ella. Agradezco mucho haber sido parte de esta colaboración y es importantísimo que la comunidad nos siga apoyando, siga creyendo en las noticias locales y en los medios pequeños, como los nuestros, que hacemos este trabajo no solamente con tanta pasión y profesionalismo sino con amor hacia nuestra comunidad, para que finalmente ella tenga la información que necesita para poder sentirse más integrada a su nueva vida en cada estado”.

🎙️️ Les recordamos también que nuestra misión es devolverle el diálogo al periodismo. Estamos aquí para crear espacios de diálogo, tener conversaciones difíciles, escucharte a ti y empezar a crear juntos, porque somos medios de comunicación de migrantes para migrantes, que representamos siempre de donde venimos. Por eso, que seas parte de nuestros medios de comunicación, de nuestras ideas e historias es muy valioso para nosotros. Nos puedes contar tu historia, hay muchas maneras de formar parte de esta comunidad y nosotros te invitamos a que lo hagas, porque si invertimos grande en lo pequeño vamos a encontrar la verdadera grandeza del periodismo que por mucho tiempo se nos ha olvidado. Estamos aquí en cualquier necesidad que vayas a tener de información, recursos y expertos, para conectarte siempre con lo que necesitas.


Conecta Arizona fue fundado por Maritza L. Félix en Phoenix, Arizona, el 11 de mayo de 2020. Directora: Maritza L. Félix.

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