El Departamento de Justicia publica solo parte de los archivos de Epstein y desata críticas por falta de transparencia

WASHINGTON (AP) — El Departamento de Justicia divulgó este viernes miles de archivos sobre el delincuente sexual convicto Jeffrey Epstein, pero la publicación incompleta de documentos no aportó avances significativos sobre las investigaciones penales de larga data del financista ni sobre sus vínculos con personas ricas y poderosas.

Los archivos incluían un pequeño número de fotografías del presidente Donald Trump, lo que por ahora evita que la Casa Blanca tenga que enfrentar nuevas revelaciones sobre una relación con Epstein que la administración ha intentado, sin éxito, dejar atrás durante meses.

Sin embargo, el material sí presentó una serie de fotografías nunca antes vistas de Bill Clinton, de un viaje que el expresidente aparentemente realizó con Epstein hace décadas.

Las reacciones a las revelaciones se dividieron en gran medida por líneas partidistas. Demócratas y algunos republicanos aprovecharon la publicación limitada para acusar al Departamento de Justicia de no cumplir con el plazo fijado por el Congreso para entregar los archivos de Epstein. Funcionarios de la Casa Blanca, en redes sociales, promovieron con entusiasmo una foto de Clinton en un jacuzzi con una persona cuyo rostro está censurado. La administración Trump presentó la publicación como una muestra de su compromiso con la transparencia, ignorando el hecho de que el Departamento de Justicia había dicho apenas meses atrás que no se divulgarían más archivos. Luego, el Congreso aprobó una ley que lo ordenó.

Los registros, que consisten en gran medida en fotografías, pero también incluyen registros de llamadas, testimonios ante el gran jurado, transcripciones de entrevistas y otros documentos, llegaron en medio de una expectativa extraordinaria de que pudieran ofrecer el panorama más detallado hasta ahora de casi dos décadas de escrutinio gubernamental sobre el abuso sexual de Epstein contra mujeres jóvenes y menores de edad. Su divulgación ha sido exigida desde hace tiempo por un público ansioso por saber si alguno de los asociados de Epstein sabía del abuso o participó en él. Las acusadoras de Epstein también han buscado respuestas sobre por qué las autoridades federales cerraron su investigación inicial en 2008.

Sin embargo, la publicación, repleta de tachaduras, parecía poco probable que satisficiera la demanda pública de información, dado el gran número de registros de investigación que el departamento indicó que continúa reteniendo.

En una carta al Congreso obtenida por The Associated Press, el fiscal general adjunto Todd Blanche escribió que el Departamento de Justicia seguía revisando los archivos en su poder y que esperaba divulgaciones adicionales antes de que termine el año. El departamento también dijo que estaba reteniendo algunos documentos bajo exenciones permitidas por la ley y que estaba censurando los nombres de las víctimas. El departamento prevé completar la entrega de documentos antes de fin de año, dijo Blanche.

Cediendo a la presión política de compañeros republicanos, Trump firmó el 19 de noviembre una ley que otorga al Departamento de Justicia 30 días para divulgar la mayoría de sus archivos y comunicaciones relacionadas con Epstein, incluida información sobre la investigación de su muerte en una cárcel federal. La aprobación de la ley, que fijó el plazo para el viernes, fue una notable muestra de bipartidismo que superó meses de oposición por parte de Trump y del liderazgo republicano.

Detalles limitados sobre Trump

Los archivos publicados incluyen un pequeño número de fotografías de Trump, que parecen haber sido conocidas durante décadas, entre ellas dos en las que Trump y Epstein posan con la ahora primera dama Melania Trump en febrero de 2000, en un evento en el club Mar-a-Lago de Trump en Palm Beach, antes de que se rompiera la amistad entre ambos.

Trump fue amigo de Epstein durante años antes de que ambos se distanciaran. Ni él ni Clinton han sido acusados jamás de irregularidades en relación con Epstein, y la mera inclusión del nombre de una persona en los archivos de la investigación no implica lo contrario.

La fiscal general Pam Bondi dijo el mes pasado que había ordenado a un alto fiscal federal investigar los vínculos de Epstein con los adversarios políticos de Trump, incluido Clinton. Bondi actuó después de que Trump presionara para que se realizara dicha investigación, aunque no explicó qué delitos supuestos quería que el Departamento de Justicia investigara.

En julio, Trump descalificó a algunos de sus propios seguidores como “débiles” por caer en “el engaño de Jeffrey Epstein”. Pero tanto Trump como el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, republicano por Luisiana, no lograron impedir que la legislación llegara a votación.

Trump dio un giro respecto a los archivos una vez que quedó claro que la acción del Congreso era inevitable. Insistió en que el asunto Epstein se había convertido en una distracción para la agenda republicana y que divulgar los registros era la mejor manera de seguir adelante.

Tras casi dos décadas de acciones judiciales y de investigaciones periodísticas, un voluminoso número de registros relacionados con Epstein ya había sido público mucho antes del viernes, incluidos registros de vuelos, libretas de direcciones, correspondencia por correo electrónico, informes policiales, registros del gran jurado, testimonios en tribunales y transcripciones de declaraciones de sus acusadoras, de su personal y de otras personas.

Nuevas fotos de Clinton

Altos asesores de la Casa Blanca de Trump recurrieron a X para promover fotografías incluidas en los archivos de Epstein que muestran a Clinton con mujeres cuyos rostros están censurados.

Karoline Leavitt, secretaria de prensa de la Casa Blanca, escribió “¡Oh, Dios mío!” y agregó un emoji de sorpresa en respuesta a una foto de Clinton en un jacuzzi con una mujer cuyo rostro fue censurado.

“Pueden publicar todas las fotos borrosas de hace más de 20 años que quieran, pero esto no se trata de Bill Clinton”, dijo el portavoz de Clinton, Angel Ureña, en un comunicado.

“Hay dos tipos de personas aquí”, dijo. “El primer grupo no sabía nada y cortó relaciones con Epstein antes de que sus crímenes salieran a la luz. El segundo grupo continuó las relaciones después de eso. Nosotros estamos en el primero. Ninguna cantidad de dilación por parte de las personas del segundo grupo cambiará eso”.

Las investigaciones sobre Epstein

La policía de Palm Beach, Florida, comenzó a investigar a Epstein en 2005 después de que la familia de una niña de 14 años denunciara que había sido abusada en su mansión. El FBI se sumó a la investigación y las autoridades reunieron testimonios de varias menores que dijeron haber sido contratadas para darle masajes sexuales a Epstein.

Sin embargo, finalmente los fiscales le ofrecieron a Epstein un acuerdo que le permitió evitar un procesamiento federal. Se declaró culpable de cargos estatales de prostitución relacionados con una persona menor de 18 años y fue condenado a 18 meses de cárcel.

Las acusadoras de Epstein pasaron entonces años en litigios civiles tratando de anular ese acuerdo. Una de esas mujeres, Virginia Giuffre, acusó a Epstein de haberle arreglado encuentros sexuales, a partir de los 17 años, con numerosos otros hombres, incluidos multimillonarios, académicos famosos, políticos estadounidenses y Andrew Mountbatten-Windsor, entonces conocido como el príncipe Andrés de Gran Bretaña. Mountbatten-Windsor negó haber tenido relaciones sexuales con Giuffre, pero el rey Carlos III le retiró este año sus títulos reales después de que se publicaran las memorias de Giuffre tras su muerte.

Los fiscales nunca presentaron cargos en relación con las denuncias de Giuffre, pero su relato alimentó teorías conspirativas sobre supuestos planes del gobierno para proteger a los poderosos. Giuffre murió por suicidio en su granja en Australia Occidental en abril, a los 41 años.

Los fiscales federales en Nueva York presentaron nuevos cargos por tráfico sexual contra Epstein en 2019, pero él se suicidó en la cárcel un mes después de su arresto. Posteriormente, los fiscales acusaron a la confidente de larga data de Epstein, la socialité británica Ghislaine Maxwell, de reclutar a menores para que Epstein abusara de ellas.

Maxwell fue condenada a finales de 2021 y cumple una sentencia de 20 años de prisión, aunque fue trasladada de una prisión federal de baja seguridad en Florida a un campamento penitenciario de mínima seguridad en Texas después de que fuera entrevistada durante el verano por el fiscal general adjunto Todd Blanche. Sus abogados argumentaron que nunca debió haber sido juzgada ni condenada.

El Departamento de Justicia dijo en julio que no había encontrado información que respaldara el procesamiento de ninguna otra persona.

Adelita Grijalva denuncia que la entrega incompleta de los archivos de Epstein viola la Ley de Transparencia

La representante Adelita S. Grijalva emitió en un comunicado publicado después de que el Departamento de Justicia anunciara que solo divulgaría un lote parcial de los archivos de Epstein, en violación de la Ley de Transparencia de los Archivos de Epstein, promulgada hace un mes, el 19 de noviembre.

“Esta divulgación parcial es un insulto para las sobrevivientes, quienes merecen justicia, rendición de cuentas y un cierre. La administración Trump ha tenido más de 300 días —y un mes completo desde que el Congreso aprobó la Ley de Transparencia de los Archivos de Epstein— para prepararse para la publicación de estos documentos. Al retener materiales que la ley exige divulgar, la administración Trump está en violación directa de la ley y desafiando activamente al Congreso.

Si bien es esencial proteger la identidad de las víctimas, es inexcusable que esta administración continúe retrasando el proceso. Como mínimo, la fiscal general Bondi debería presentar un calendario para la divulgación completa de los archivos, una explicación del retraso y una descripción general del material que se está reteniendo”.

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